¿Quiénes somos?

Nuestros orígenes se remontan a 1940, año en el que la familia “del Cerro” construyó el primer molino de piedra con el que moler la aceituna.

Trabajamos con la aceituna que recibimos de los agricultores de Castilla La Mancha, especialmente de la provincia de Toledo que durante todo el año, con sacrificio y esfuerzo, cuidan la producción de sus tierras.

Con esta excelente materia prima producimos un aceite de oliva de gran calidad, con el objetivo del reconocimiento a la dedicación de las generaciones pasadas, las presentes y las que están por venir.

Con la unión de tradición, historia y buen hacer, elaboramos nuestro aceite Cerroliva, el oro líquido de nuestra tierra.

Los aceites de Cerroliva poseen el reconocimiento internacional. Prueba de ello es el premio recibido como Estrella de Oro Internacional a la Calidad en 1999 (Ginebra).